1. Reducción del consumo de recursos: Al reciclar plástico para hacer bancas, se reduce la necesidad de utilizar recursos naturales como el petróleo, que es el material base para la fabricación de plástico virgen.

2. Durabilidad: El plástico reciclado puede ser tan resistente y duradero como el plástico virgen, por lo que las bancas hechas con este material pueden durar mucho tiempo y resistir las condiciones climáticas y el desgaste diario.

3. Bajo mantenimiento: Las bancas de plástico reciclado suelen ser fáciles de limpiar y mantener, ya que el material es resistente a la humedad, la corrosión y la decoloración.

4. Versatilidad en diseño: El plástico reciclado se puede moldear en una variedad de formas y colores, lo que permite a los diseñadores crear bancas con diferentes estilos y estéticas para adaptarse a diferentes entornos urbanos o naturales.

5. Promoción de la economía circular: Utilizar plástico reciclado en la fabricación de bancas ayuda a cerrar el ciclo de vida del material, promoviendo así un modelo de economía circular donde los recursos se reutilizan y reciclan en lugar de desecharse después de su uso inicial.

Banca de 90 cm